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El 100% de las ventosas que encontramos en el comercio siempre son de muy buena calidad. Crean el VACÍO DE AIRE para adherirse allí donde se fijan. Es astuto y muy práctico.
Pero para conservar el VACÍO DE AIRE hay que cuidar que haya una ESTANQUEIDAD PERFECTA entre la ventosa y la superficie sobre la que está fijada.
Así que, para que una ventosa se sujete perfectamente es necesario:
Lamentablemente, todas las ventosas, incluso súper bien fijadas, no se sujetan en el lugar. Esto es completamente normal. Pero no hay que agobiarse: por lo general se mantienen fijas de varios meses a un año y mucho más. Basta con volverlas a fijar. Mientras más grandes son más tiempo se mantienen fijas ininterrumpidamente.
Un consejo: vuélvalas a fijar de vez en cuando para refrescar el vacío del aire.
“Quien marcha seguro no tiene miedo de caer” Corneille (Poly.II,6)